Quiénes son los afectados

La Ventana Indiscreta
Quiénes son los afectados
Por Maritza Gueller

Emergencia. Ni bien bajaron las acciones de Freddie Mac y Fannie Mae el gobierno salió a respaldar a los dos grandes colosos de los préstamos. El mercado nacional comenzó a temblar, y el mundial, puso sus barbas en remojo por aquello del viejo dicho: “cuando veas a tu vecino sus barbas afeitar...” Pero para el ciudadano común, que todos los meses tiene que pagar su hipoteca; para el que ya no puede pagarla y para el que está pensando cómo hará para comprar su casa, todo resulta totalmente indescifrable.

Los que saben. En una conversación privada con Erick Gutiérrez, Director Regional de Vivienda de Latino Economic Development Corporation (LEDEC) comentó que los préstamos que hicieron los bancos fueron “malos préstamos” y que ahora son Freddie y Fannie los que tiene que ausumir las pérdidas. Pero no sólo se trata de eso. Ocurre que ante este panorama, los inversionistas están sacando su dinero de las acciones de estos dos gigantes. “El gobierno no puede dejar que Fannie Mae y Freddie Mac se caigan”, dijo Gutiérrez. “Si ellos se caen se derrumba todo, y muchos mercados nacionales y extranjeros se caerán”. Quién diría que en ocho años de gobierno de Bush, una economía que pintaba floreciente haya quedado destrozada.

En casa. Gutiérrez, reflexionando sobre la crisis, pensó desde su lugar de ciudadano común. “Como persona que pago impuestos rigurosamente, siento que vamos a ser nosotros los que pagaremos este rescate de Fannie Mae y Freddie Mac”. Y la ilusión de tener un seguro de salud o un fondo jubilatorio cae por tierra. ¿Otra vez los que menos tienen deberán sacrificarse por los malos negocios de los que más tienen? Y la mayoría de los latinos que compraron casa están “casados” con Freddie y Fannie.

Sueños. Casi broche final de la conversación Gutiérrez se animó a soñar. “La única manera de salvar la situación es que los bancos, a través de Fannie Mae y Freddie Mac, puedieran reajustar los préstamos sobre el valor real de las casas y no sobre el valor que tenían cuando se compraron”, dijo. Y tal vez, si se hace el esfuerzo de desear mucho algo, ese algo se cumpla por arte de magia.

maritza@eltiempolatino.com